18 de febrero de 2010
Mitad planta y mitad animal
Así es como podríamos describir, de manera muy inespecífica, a la fiera que tiene hoy el papel de protagonista. Pero que nadie se alarme, no se trata de ningún híbrido milagroso. Cuando hablamos de supuestos seres vivos que están entre animales y plantas lo que queremos decir es que existen criaturas que pueden tener características de ambos reinos, ¿no os parece una historia de cuento?.
Pues así es la Elysia chlorotica. Se trata de una babosa marina, de la familia Placobranchidae, que habita el litoral norteamericano, extendiendo su territorio natural desde las costas de Nueva Escocia hasta el sur de Florida. Esta especie se hizo muy famosa por ser el primer animal en el que se demostró la capacidad de producir clorofila y realizar la fotosíntesis . No os vamos a engañar, se trata de un animal, y más concretamente hablamos de un molusco de entre 3 y 6 cm pero puede que a alguien se le haya escapado un pequeño detalle, ¿qué es la fotosíntesis?
Pues bien, los animales comemos (entre otras cosas) a otros seres vivos para poder alimentarnos, es gracias a ellos que conseguimos gran parte de nuestra energía, es decir, los necesitamos. Pero la idea es que los únicos que producen su propio alimento son los vegetales, y para ello necesitan sintetizar el alimento, que consiguen del aire y del suelo, mediante un proceso químico por el cual se convierte la energía luminosa en energía química. Y los vegetales con clorofila son los únicos que pueden hacerlo, exceptuando a nuestra
babosa.
Pero no penséis que nuestra babosa es mágica, también tiene truco. La Elysia chlorotica se alimenta de algas pero, a diferencia de cualquier otro animal que las come, dentro de esta babosa estas algas se descomponen de una manera que las estructuras fotosintéticas quedan preservadas, intactas. En el siguiente proceso estas estructuras fotosintéticas, llamadas cloroplastos, se trasladan a la “piel” de la babosa (de ahí que sean de un color verde tan intenso), y una vez allí siguen realizando la fotosíntesis con total eficacia.
Y no penséis que eso es todo lo que puede hacer nuestra amiga la babosa. Científicos han descubierto que esta babosa no solamente es capaz de "robar" los cloroplastos de las algas que consume, sino que también lo hace con los genes reponsables de la producción de clorofila, pudiendo traspasarlos a las generaciones siguientes e incluyéndolos así en su carril evolutivo.
Nunca dejarán de asombrarme los distintos métodos de supervivencia que la evolución ha ido marcando, formando las criaturas más insólitas que nadie podría imaginar. Cualquiera podría pensar que "sólo es una babosa", pero no es así.
Abrazos fieros para todos.
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4 comentarios:
Un animal increíble. Muchas gracias por la información, cómo te lo curras!
Besitos!
Que increible!!! Ni idea de que existia...... saludos!
Muy buena información, muy interesante, sinceramente ni se me había imaginado, saludos!
Me alegra que tu guste, compañer@!
Saludos!
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