Estrellas de mar

Presentación de la especie.

No son pocas las personas que se sorprenden al escuchar que las estrellas de mar, seres aparentemente inertes y que muchas veces tan sólo las tenemos presentes decorando nuestros acuarios, son realmente una clase de animal, un ser vivo. Sin embargo cuando hablamos de estrellas de mar no estamos hablando de una especie en concreto, sino de una clase de animales, cuyo nombre científico es asteroideos o Asteroidea, que pertenece al filo de los equinodermos o Echinodermata (al igual que, por ejemplo, los erizos de mar) del cual se conocen alrededor de 2.000 especies vivientes distintas.

Morfología general.

Los Equinodermos tienen un endoesqueleto, es decir, un esqueleto interno que consiste en duros osículos (pequeños huesos) formados a partir de carbonato cálcico incrustado en las paredes del cuerpo, en ocasiones formando rígidas espinas emergentes. Dichos osículos pueden estar encajonados unos con otros formando una especie de caparazón (como es el caso de los Erizos de mar) o permanecer separados (como en los llamados "pepinos de mar). Concretamente, las estrellas de mar forman su peculiar caparazón con una simetría pentaradial, o lo que es lo mismo, su aplanado cuerpo está formado por un disco pentagonal con cinco brazos o más.

Su forma de vida.

Localizadas en mayor parte dentro de los territorios acuáticos del océano Atlántico, desde las costas del norte de Europa hasta las islas de Cabo Verde, las estrellas de mar habitan frecuentemente sobre fondos rocosos y sustratos pedregosos, también en barro, arena e incluso en medio de las algas en profundidades que pueden alcanzar los 200 metros. En lo referente a su alimentación, y aun que pueda resultar difícil de creer, la inmensa mayoría de las estrellas de mar son depredadoras, plegándose sobre su víctima e introduciendo la comida casi directamente en su estómago para digerir las partes blandas de moluscos como el mejillón, aun que también suelen alimentarse de pequeñas partículas que extraen del fondo marino.

Cabe destacar dentro de su forma de vida lo asombroso que es su sistema de reproducción. Empezaremos diciendo que se pueden encontrar tanto especies que pueden presentar sexos separados como especies hermafroditas, dando lugar a larvas planctónicas de forma triangular. Sin embargo, las estrellas de mar se caracterizan generalmente por la capacidad de reproducirse de una manera totalmente asexual, gracias a su increíble poder de regeneración que puede presentarse de dos maneras. La llamada esquizogonia distal, en la que el disco corporal se divide en dos mitades y cada una regenera los tentáculos, y la esquizogonia branquial, en la que un sólo brazo es capaz de regenerar el animal entero.

Especies.

Una vez presentado al animal y a sus características es hora de conocer las distintas especies que nos podemos encontrar, aun que evidentemente no podemos describir las cerca de 2.000 especies existentes. Os ofrecemos un pequeño repaso sobre las especies más características y/o llamativas:

Estrella de mar común.

Recibe el nombre científico de Asterias rubens, y es una especie que cuenta con cinco brazos terminados en punta, cubiertos de espinas calcáreas dispuestas en filas o de forma dispersa. Suele medir entre 12 y 15 cm de diámetro, aunque algunos extraordinarios ejemplares pueden alcanzar los 50 cm. Suelen presentar un color de tonos anaranjados o marrónes, en ocasiones con sutiles tonos púrpuras.

Estrella de mar de sangre

Recibe el término científico de Henricia oculata, y se trata de una estrella que puede alcanzar los 10-12 cm de diámetro, con un cuerpo constituido por un disco pequeño y brazos cilíndricos redondeados. Su superficie es rugosa y tiene pequeñas espinas que la cubren distribuidas de forma irregular, pero su característica más llamativa es sin duda su color rojo sangre, con algún tono de púrpura, algo más claro en la zona ventral.

Estrella de mar de arena.

Su nombre científico es Astropecten irregularis y suele medir unos 12 cm de diámetro, pudiendo llegar incluso a los 20 cm. Tiene 5 brazos son de forma triangular alargada y la superficie dorsal es aplanada, cubierta de papilas. En los lados tiene placas marginales, dorsales y ventrales; las primeras tienen a veces una espina, y las segundas con 4 a 5 espinas horizontales, siendo las centrales más largas. Placas ambulacrales con 3 espinas internas y otras 3 externas. Su color es marrón con tonos rosáceos en el dorso y más pálido en la zona ventral.

Estrella de mar picuda.

Su nombre científico es Marthasterias glacialis y se trata de la estrella de mar de mayor tamaño presente en Canarias, pudiendo alcanzar fácilmente los 30 cm de diámetro, aunque se han observado individuos de hasta 60 cm. Tiene el disco central pequeño en relación a sus robustos cinco brazos, cubiertos de espinas. Presenta una coloración más o menos uniforme, de tonos que van desde el pardo al azul o verdoso, con los surcos ambulacrales de color naranja.

Estrella de mar azul.

Su nombre científico es Linckia laevigata, es una estrella que también puede crecer bastante, pudiendo llegar a un diámetro o longitud máxima entre puntas opuestas de sus brazos de hasta 30 cm. Su cuerpo es pequeño y los brazos son delicados y muy redondeados, lo más llamativo de esta estrella es su coloración mayoritariamente azul, pudiendo varias entre tonalidades claras y oscuras dependiendo del ejemplar, aun que dependiendo también de la profundidad de su zona puede presentar tonos de colores amarronados o anaranjados.

Estrella de mar nudosa

Su nombre científico es Nodosus Protoreaster y hablamos de una llamativa especie de estrella de mar que puede alcanzar los 30 cm de diámetro. Posee filas de espinas dispuestos en una hilera y distribuidos radialmente en la parte dorsal, utilizadas para ahuyentar a los posibles depredadores. Su color es generalmente de tonos de rojos o marrones oscuros, y de un llamativo e intenso rojo o púrpura las espinas.

Estrella de mar de capitán.

Su nombre científico es Asterina gibbosa, y es una pequeña estrella con un diámetro entorno a los 5 cm, con el cuerpo con 5 brazos y de forma subpentagonal, siendo los extremos de los brazos redondeados. la superficie dorsal tiene apariencia de estar hinchada, aun que la parte ventral es bastante más plana. Tiene dos espinas cercanas a la boca y su color suele ser un verde pardusco en la zona dorsal, pudiendo encontrar ejemplares de colores más pálidos o moteados.

Y como hoy es Lunes y toca actualizar la "Recomendación de la semana", y aprovechando que el tema hoy va sobre estrellas, es dejo esta semana una preciosa galería dedicada a estos increibles animales, como siempre encontraréis el link en la columna de la derecha.

Abrazos fieros para todos.